viernes, 3 de octubre de 2008

Roland Topor, 'La cocina caníbal'

Separe a dos enamorados. Ponga en una olla un trozo de mantequilla del tamaño de un bebé. Cuando la mantequilla esté caliente, mate a los enamorados deshechos en lágrimas, vacíelos, y, después, póngalos a cocer juntos. Cuando hayan adquirido una bonita palidez, retírelos. Haga un caldo con harina y mantequilla, sal, pimienta, un ramito de muguete (si es temporada), tomillo y laurel. Vuelva a echar a los enamorados en la olla, con una docena de cebollitas tiernas y, quince minutos antes de servir, añada unos cuantos champiñones. Se pueden agregar unos golpes y unas cuantas heridas.

5 comentarios:

lawant.ed dijo...

Me encanta! Es que Jodorowsky es genial. La primera vez que vi algo yo era bien chica, pero se me quedo grabado. Adoro a ese puto loco, todo lo que dice y hace... Como plantea las cosas, de veras, mas de una vez querria hacerlo como el. Me recuerda mucho a Woody Allen (en sus peliculas claro), con sus histerias y sus situaciones de caos.
Quiero ser una loca asi.



A que salia favorecida la foto? xDD
Chanán! (que no podia faltar)

=)

Belén dijo...

Uy dios, pero al carne no es muy jasca???

Yo me sigo quedando con los adolescemtes ;)

Besicos

Anónimo dijo...

para mi gusto falta la tacita de orgasmos y las heridas deberían reposar unas semanas antes de servir en plato.

antes era zhenda, me preguntaba si las sirenas hacían papiroflexia. ahora entiendo que casi todas las vías son lácteas.

encantada.

M. Zawidey dijo...

Gol de quién entonces?

Anónimo dijo...

lo que yo queria, gracias

 
ir arriba